Nada más llegar a casa, como buen Community Manager, he revisado los correos y cuentas de twitter... Me he encontrado con la sorpresa de un supuesto "golpe de Estado" en Ecuador que no se parece a nuestro 23F, sino a una turba de policías airados porque se les ha bajado el sueldo y se les han retirado algunos incentivos.
Mañana sabremos más de esta historia, pero en estos momentos no puedo quitarme de la cabeza una foto que mi madre posteó hace unos días en Feisbuk y resume perfectamente, a mi entender, la dignidad y el respeto que se merece el trabajo de quienes se juegan la vida cada día defendiendo los valores morales, las leyes y, sobre todo, la propiedad privada (al menos al de algunos).
Supongo que mi señora madre (y como ella muchos otros) encontraron graciosa la fotografía de un miembro de la benemérita con su "miembro" en la mano y descargando sus aguas menores en un espacio público... La verdad es que a mí me parece una imagen inquietante que demuestra dos cosas: La primera es la falsedad evidente de aquel escatológico refrán que proclamaba "Churra española nunca mea sola" y la segunda es el lamentable estado de nuestras instituciones, que evidencia esta foto y explica en parte el esperpento de la juerga general que vivimos el pasado día 29.
Hace tiempo que reduje mi consumo televisivo a cero horas diarias en favor de perderme entre un bosque de pestañas y un mar de links en busca de información, unas risas o cualquier otro de los posibles beneficios de la Red. Por eso, mi seguimiento de la pasada juega general convocada por los sindicatos contra la oposición, contra los empresarios que han sobrevivido a la crisis y contra los ciudadanos que querían ejercer su derecho constitucional a un trabajo más o menos digno, ha sido a través de los canales que pone a nuestra disposición la Web 2.0
Lo normal sería que los autonombrados adalides de la clase obrera (léase sindicatos) hubiesen centrado su ira sobre un Gobierno que se ha demostrado inoperante, ineficaz y sin una pizca de respeto por el pueblo... No sé cuántos millones de euros en subvenciones y prebendas concedidos a los sindicatos serán necesarios para explicar semejante actitud, pero el esperpento resultante hace que los ciudadanos descubramos (bueno, eso los que no lo supieran ya) que en esta extraña democracia contamos con una institución menos en quien confiar. Por eso no me extraña que un amigo afirmase en su blog que "Lo importante de la huelga son los telediarios"
Otra amiga publicó en su perfil de Feisbuk (y aún lo mantiene) que "4.500.000 españoles no pueden hacer huelga porque no tienen trabajo. Lo perdieron mientras UGT y CCOO atendian a sus mariscadas"
Dejando de lado la juerga y volviendo a la fiesta de Una Mirada Al Sur... Sentados a la misma mesa un puñado de personajes de diversos orígenes y profesiones, era prácticamente inevitable que surgiese el tema de las variantes regionales de nuestra lengua común: Desde el uso de la palabra "concha" al término "párate" (que en peruano significa "levántate", no me pregunten por qué), hasta que una de las tertulianas refirió algo así como "En nuestro país botamos la basura cada noche" y yo no pude evitar responderle que en el mío la votamos cada cuatro años...
PD: Yo no sé vosotros, pero a mí la próxima vez que un agente me pida amablemente la documentación del vehículo, me va a costar horrores no preguntarle si se ha lavado las manos.